El viento sopla sobre la tierra seca. Unos pocos pastos quedan sobre la tierra. La única pared está completamente oculta detrás de carteles promocionando grupos de cumbia y boliches de la zona. Hay gente sentada sobre unos bloques de cemento que son utilizados como sillas; parecen ser las únicas cosas que sobrevivieron al tornado que parece haber pasado por ahí. Unos papeles y basura completan la imagen.
La “escalera a la nada” es el elemento más sobresaliente, demás está decir…
Es verdad, una plaza cerca de una estación de tren siempre tiene los días contados. Pero esta parece que nunca los tuvo.
La escalera del tobogán, sin el tobogán, es una imagen que vale mil palabras. Primero, no me gustaría estar si un niño cualquier sube esa escalera. Peldaño a peldaño, esfuerzo tras esfuerzo, la fuerza que lleva a un niño pequeño a trepar para llegar a la cima y confluir toda esa energía en los segundos de diversión que generan el resbalarse por el tobogán. Todo para nada… se iría a la mierda el pibe, bah.
Parece ser el tobogán que representa el gen argentino: mucho esfuerzo para nada. Es una enseñanza el tobogán…esfuérzate y tendrás tu recompensa. Somos los que siempre ponemos el esfuerzo sin tener jamás la recompensa.
Representa, segundamente…la malicia de la gente. ¿Cuánto puede valer un kilo de metal? Bueno, una o dos cervezas… lo que hace que valga la pena robarse hasta un tobogán. No existe nada no robable últimamente. Desde la loba de Rómulo y Remo, la estatua de Olmedo, el reloj de Belgrano… y ahora, más humildemente… un tobogán de Lanús.
La “escalera a la nada” es el elemento más sobresaliente, demás está decir…
Es verdad, una plaza cerca de una estación de tren siempre tiene los días contados. Pero esta parece que nunca los tuvo.
La escalera del tobogán, sin el tobogán, es una imagen que vale mil palabras. Primero, no me gustaría estar si un niño cualquier sube esa escalera. Peldaño a peldaño, esfuerzo tras esfuerzo, la fuerza que lleva a un niño pequeño a trepar para llegar a la cima y confluir toda esa energía en los segundos de diversión que generan el resbalarse por el tobogán. Todo para nada… se iría a la mierda el pibe, bah.
Parece ser el tobogán que representa el gen argentino: mucho esfuerzo para nada. Es una enseñanza el tobogán…esfuérzate y tendrás tu recompensa. Somos los que siempre ponemos el esfuerzo sin tener jamás la recompensa.
Representa, segundamente…la malicia de la gente. ¿Cuánto puede valer un kilo de metal? Bueno, una o dos cervezas… lo que hace que valga la pena robarse hasta un tobogán. No existe nada no robable últimamente. Desde la loba de Rómulo y Remo, la estatua de Olmedo, el reloj de Belgrano… y ahora, más humildemente… un tobogán de Lanús.
1 comentario:
xD LA DECORACION DE LOS VAGOS TOMANDO VINO TODO EL DIA ES LO QUE LE DA EL ENCANTO A LA "PLAZA"....JAJAJJA ME CAUSA GRACIA LA FORMA DE REDACCION... PARECEN LAS HISTORIAS DE "LOS AMIGOS DE BART".TODA LA ONDA... MENOS LA PLAZA...SALUDOS
Publicar un comentario